Alejarnos de las personas que nos hacen daño nos libera de vínculos que carecen de sentido. Pero antes de hacerlo hay que ser conscientes de la situación y saber elegir el momento y el modo adecuados.
Es evidente que nadie, en su sano juicio, quiere seguir manteniendo una relación que, con el tiempo, se ha vuelto tóxica. Sin embargo nos cuesta saber qué hacer cuando nos sentimos incómodos ante una persona o varias. ¿Cómo rechazar a alguien sin que se sienta herido? ¿Existe alguna manera de cortar un vínculo que se ha vuelto tóxico sin provocar una guerra?