A pesar de que todos los fármacos son sometidos a controles muy rigurosos antes de ser aprobados definitivamente para su utilización, es evidente que algunos temas relacionados con su seguridad no pueden ser detectados hasta su comercialización en poblaciones grandes y variadas.
Por tanto, la asociación que selecciona los mejores fármacos para niños solicitó a la FDA (Organismo que controla los alimentos y fármacos) que comunicara todos los efectos adversos ocurridos durante un período de 1 año, desde que se le concede al laboratorio la comercialización exclusiva de un fármaco. A su vez, en este estudio, un comité pediátrico, ha revisado todos estos fármacos desde junio de 2003 hasta abril de 2007. Los resultados obtenidos son los siguientes: por la escasa frecuencia o poca gravedad de efectos secundarios, el 65,7% de fármacos fueron devueltos a un sistema de vigilancia que consiste en la supervisión rutinaria de efectos no deseados. El resto fué sometido a nuevas investigaciones.
En conclusión, existen efectos adversos raros e incluso graves, pero afortunadamente la mayoría de los fármacos no tienen efectos secundarios frecuentes o graves; aunque permanecen bajo un seguimiento rutinario de posibles o nuevos efectos adversos. Adaptado de P. Brian Smith, MD y cols. Pediatrics. 2008;122:e628-e633.
URL: www.pediatrics.org/cgi/doi/10.1542/peds.2008-0585